ENTEVISTA

Entrevista:

Nos encontramos con diversos teóricos de la sociología de la educación, representantes de los enfoques funcionalistas para quienes tenemos algunas preguntas muy interesantes: 

Dentro de sus representantes, vamos a comenzar con el Sr. Durkheim: 

-Sr. Durkheim, ¿Podría indicarme por favor cuáles fueron los tres aspectos decisivos de la sociología para el desarrollo funcionalista de la educación?

-Durkheim:   Primeramente, las transformaciones del sistema educativo son producto de los cambios económicos y sociales que se llevan a cabo externamente de manera global. En segundo lugar, afirmo totalmente que las características específicas de las estructuras educativas y sus contenidos culturales guardan una fuerte relación con las necesidades de la sociedad. En tercer lugar, como consecuencia de la transición de una sociedad mecánica a otra orgánica, se hace precisa una mayor individualización y esto se refleja en los cambios en la pedagogía y en la organización escolar.

 En mi obra: “Educación y sociología” tuve que desmontar la antropología kantiana, pues para el sr. Kant,  la educación consiste en el desarrollo armónico de las facultades humanas y yo encuentro tres líneas de ruptura ante esa tesis, primero que nada, la educación es además de lo teórico, una serie de prácticas ligadas a las instituciones sociales, es un hecho social, es decir, que una de sus características es que es algo externo a nosotros y aunque es externo también nos afecta ejerciendo una constricción. En segundo lugar, la educación no es parte de un proceso natural, sino de creación y producción, social y por ende, inarmónica. La práctica educativa va creando y humanizando a la gente, no como una extracción “de la naturaleza humana” que es lo que considera el Sr. Kant, y por último, los idealistas consideran que el maestro sólo debe enseñar, como un estado hipnótico, relaciones de dominación ideológica y no es así, un maestro debe ir mucho más allá de sólo enseñar, el sistema educativo es un instrumento de dominación de las almas, La escuela es una institución de poder. La función de la escuela es la imposición de la legitimidad de una determinada cultura o forma de vida.    

 

 -Sr. Parsons. De acuerdo a su pensamiento, uno de los hechos claves de la modernización es la revolución educativa, ¿nos puede explicar por favor, ¿cuáles son sus características y funciones del sistema educativo?

-Parsons: Claro que sí, fundamentalmente me refiero a la inmensa extensión de la  igualdad de oportunidades, aunque también acarrea diferencias de logro, derivados de la diferencia entre los individuos, respecto a sus habilidades, orientaciones familiares, aspiraciones y actitudes en la familia frente a la educación, ello conlleva desigualdad, pues las credenciales académicas van a determinar el empleo que se va a terminar ocupando y es justamente el sistema educativo el que va a legitimar esas desigualdades, consiguiéndolo a través del proceso de socialización, elemento clave de la cultura común existente en las sociedades modernas.

 

-Sr. Bernstein. Díganos por favor, en muchas ocasiones los profesores no reconocen una idea como válida sino se expresa en el estilo y terminología a la que está habituado. ¿Qué piensa usted al respecto?

 

-Bernstein: Se suele considerar el lenguaje de la clase obrera inadecuado para el tipo de tareas intelectuales o cognitivas que constituyen la base de la educación. cuanto más bajo sea el estrato social mayor es la resistencia a la educación y a las enseñanzas formales. Esta resistencia se expresa de distintos modos: problemas de disciplina, no aceptación de los valores del profesor, fracaso a la hora de desarrollar y hacer sentir la necesidad de un vocabulario extenso, una preferencia por lo descriptivo más que por un proceso cognitivo analítico. En las clases sociales superiores la socialización está formalmente organizada. El lenguaje condiciona comportamientos en diversos contextos, y de esta manera se convierte en un instrumento que permite la evolución del niño a la autonomía y posteriormente a un orden de pensamiento más estructurado y reflexivo. Un lenguaje formal, un código elaborado y en cambio, en la estructura familiar de la clase obrera está menos organizada formalmente que la de clase media en relación con el desarrollo del niño y se hace uso de un código restringido por sus condiciones materiales de vida.

 

-Sr. Marx usted coloca el trabajo y el mundo de la producción como centro de todos sus planteamientos sociales, sabemos que independiente de la asignatura a la que hagamos referencia, se tiene un código lingüístico como tema central en las escuelas y en muchas ocasiones los profesores no reconocen una idea como válida sino se expresa en el estilo y terminología a la que está habituado. ¿Qué piensa usted al respecto?

-Marx: Para mí el hombre se hace hombre gracias a su actividad práctica, su actividad en el trabajo. Se hace necesario conseguir una educación polivalente, integral, el poder superar sólo la enseñanza académica que forma alumnos para trabajos de abstracción, de creación, con capacidades de dirigir, a diferencia de la enseñanza técnico-profesional que los orienta hacia actividades manuales, de producción, de ejecución, que requieren mínima capacidad cognitiva, mayormente todo es práctico. Incluso hay que poner a trabajar a los niños desde los nueve años, al mismo tiempo que son alumnos para que sean capaces de relacionar los conocimientos académicos con el mundo de la producción, eso sí, no hay que permitir que la iglesia, ni el gobierno intervengan en la escuela.

 

-Señores Baudelot y Establet, ¿podrían por favor exponernos a qué se refieren con la “teoría de las dos redes” y cuáles son los dos tipos de prácticas escolares a los que se refieren?

-Baudelot y Establet: Consideramos que la división escolar responde a una división existente en la sociedad, es decir, la división de clases: burguesía y proletariado. La red primaria profesional y la red secundaria superior. La escuela tiene un sentido para los que alcanzan la cultura que da la universidad, principalmente la burguesía y las capas medias de la misma, para los estudiantes del proletariado, la enseñanza profesional de primer grado desemboca en el mercado de trabajo. La prolongación de la escolaridad obligatoria no acaba con la división de clases, más bien las agrava.

Las prácticas escolares de la red profesional son prácticas de repetición y las de secundaria académica son prácticas de continuidad, graduadas progresivamente; la red profesional cuida a sus  alumnos más económica y menos directiva posible y la red secundaria superior funciona con base a la emulación y selección individual.

La red profesional posiciona lo concreto a través de la lección de las cosas y la red académica en el culto al libro y la abstracción.

 

-Bowles y Gintis, ustedes plantean que las instituciones económicas y sociales sirven para perpetuar y reproducir el sistema capitalista y debido a ello no puede actuar como un agente de cambio para generar una mayor igualdad. ¿Qué nos puede comentar al respecto? 

-Bowles y Gintis: Quienes piensen que la educación puede contribuir a la solución de los problemas sociales, es víctima de una comprensión incompleta del sistema económico, se tiene que analizar el funcionamiento del sistema capitalista. La gran mayoría de las acciones de los trabajadores, son dominadas por una reducida minoría, los propietarios y gerentes, que buscan su beneficio, reforzando ideologías y creencias, respecto al sistema educativo, éste se encarga de integrar a los jóvenes al sistema económico, desarrollando una vez integrado al trabajo, la forma de comportamiento, una imagen e identidad donde va a existir una jerarquía de diferentes niveles educativos que se van a corresponder con diferentes niveles de estructura ocupacional. Por ejemplo, con un título universitario se podrá accesar a un mayor grado de autonomía, así mismo en la especialización y fomentando la competencia entre los estudiantes.

 

Sr. Paul Willis, ¿Qué es lo más relevante de su investigación?

-Willis: Logré analizar los elementos que constituyen su cultura, uno de ellos es la oposición a la autoridad y rechazo del conformismo, la oposición a la escuela se manifiesta como un estilo de vida, la escuela es el lugar de lo formal y el grupo de lo informal carente de una estructura sólida, es una contra-cultura. No aceptan el credencialismo escolar, el hecho de que no todos aspiren a las recompensas y satisfacciones del trabajo mental es algo que necesita explicación. El que el capitalismo necesite esta división no explica por qué se satisface esa necesidad.

 

-Sr. Weber, ¿Cómo contribuyó usted al tema educativo?

-Weber:   Realmente fue a través de la sociología de la religión donde me ocupe un poco de la educación, en términos generales, la iglesia, la escuela y la familia constituyen asociaciones de dominación, en el entendido que son quienes ejercen control sobre otros, en un grado socialmente relevante. Por ejemplo, la escuela determina qué cultura es legítima, el sistema de enseñanza va a aparecer cuando se dan cuatro condiciones. La educación carismática ya es pre-existente en el individuo, es más propia del guerrero y el sacerdote, la educación estimula y desarrolla esas cualidades estrictamente personales, la educación humanista cultiva un determinado tipo de vida, por ejemplo el hombre culto, el gentleman, esa educación comporta ciertas actitudes y comportamientos y la educación especializada, desemboca en un proceso de racionalización y burocratización de la sociedad contemporánea, por ejemplo el burócrata, el experto. El profesor es un especialista-burócrata cuya función es instruir, informar sobre los hechos y ayudar a que el alumno elija, y elija bien, su propio dios y su propio demonio. Gracias.

-Randall Collins, la pregunta que tengo para usted es la siguiente: ¿Qué es lo esencial del credencialismo duro?

-Collins: En esencia, las credenciales educativas se convierten en una coartada para justificar el acceso a las posiciones sociales privilegiadas, a pesar, de que detrás de ellas no hay conocimiento, Un empleo que antes no exigía educación formal ahora requiere para su desempeño que los trabajadores cuenten con un título de enseñanza media. Los requisitos educativos de los empleos se incrementan, se solicitan mayores destrezas tecnológicas y la educación formal proporciona formación para los trabajos más cualificados.

 

-Lester Thurow, ¿Qué nos puede decir acerca del credencialismo débil?

-Thurow: Tengo algunas discrepancias con respecto a la teoría del capital humano, por ejemplo:

 

1. La distribución de la educación es más uniforme que la de la renta.

2. Mientras que la distribución de la educación se movió durante el periodo de postguerra en dirección a una mayor igualdad, la distribución de la renta no lo hizo.

3. Un índice de crecimiento más rápido de la educación no se ha traducido en un incremento más rápido de la economía.

En un mercado basado en la competencia por los puestos de trabajo la función de la educación no es proporcionar formación y de ese modo aumentar la productividad y los salarios de los obreros, sino más bien certificar la "entrenabilidad" y proporcionar una cierta posición en virtud de dicha certificación.

 

Sr. Pierre Bourdieu ¿a qué se refiere con que la escuela ejerce una violencia simbólica sobre sus usuarios?

-Bourdieu: La violencia simbólica es la imposición de sistemas de simbolismos y de significados sobre grupos o clases de modo que tal imposición se concibe como legítima. La legitimidad oscurece las relaciones de poder, lo que permite que la imposición tenga éxito. En la medida en que es aceptada como legítima, la cultura añade su propia fuerza a las relaciones de poder, contribuyendo a su reproducción sistemática, siendo arbitraria en su imposición y contenido. Ciertos aspectos de la cultura no pueden explicarse a partir de un análisis lógico ni a partir de la naturaleza del hombre. En occidente el matrimonio es monógamo, en otras sociedades es polígamo y se puede imponer por tres vías: la educación difusa, familiar e institucionalizada. Toda enseñanza, sea familiar o escolar, descansa en la autoridad. En una sociedad dividida en clases el capital cultural está muy desigualmente distribuido. Al hacer aparecer las jerarquías sociales y la reproducción de estas jerarquías como algo basado en la jerarquía de dones, méritos, destrezas establecidas y ratificadas por sus sanciones, o en una palabra, al convertir las jerarquías sociales en jerarquías académicas, el sistema educativo cumple una función de legitimación cada vez más necesaria para la perpetuación del orden social.

 

-Con esto hemos terminado nuestra entrevista, ¡Muchas gracias a todos!